Era hora de almorzar y en un puesto al costado de la ruta paré a comprarme unos kilos de uvas. Algunas fueron a la conservadora para enfriarse y un “cacho” de casi un kilo fue mi compañero de viaje, tomando asiento junto a mí en una bandeja.
Mi mano derecha tomaba una a una a cada paso, mientras recorría la ruta.
Esa parada también fue para traerme un recuerdo: unos potes de mermelada de alcayota con nueces y unos vinos pateros.
Hoy hemos entregado los premios Best Blog, y a ti te hemos nombrado mi bloguero fotógrafo favorito, ahí te dejo el enlace para que lo veas, un besito.
ResponderEliminarhttp://anticrisis2013.blogspot.com.es/2013/05/capitulo-clxvi-premio-best-blog-abril-3.html
muyyyyy lindo Ricky...aca sentada en la oficina aunq con la costanera se ve por la ventana, esos paisajes abiertos son maravillosos!
ResponderEliminarFantásticos racimos de uva, que imagino era de mesa y no para hacer vino.
ResponderEliminar