Como todos los años, unos vecinos voluntariosos con gran corazón organizan los festejos.
Hacen que los Niños, un día al año tengan una gran alegría.
Con una copa de Leche Chocolatada, Medias Lunas, galletitas y Caramelos.
A ello, le suman la participación de alguna comparsa, que en esta oportunidad fueron dos.
Yo abrí mis puertas, con mi muestra fotográfica, para que algunos también tengan un minuto de distración de otra naturaleza.
Muchos asistentes, todas caras sonrientes.
He retratado a la gran mayoría, pero como ustedes pueden imaginar, no se pueden compartir todas esas alegres imágenes.
Hoy, me limito, a mostrarle el maravilloso momento que nos tocó vivir esta tarde.
Muchas Gracias Marcelo por este gran Corazón.