… de la pared
Hace unos días veo en mi jardín que a la común visión de la enredadera del vecino con flores que solía pasar solamente por la parte superior de la pared, a media altura se hallaba un racimo de flores y hojas.
De lejos parecía un coqueto aplique que adornaba el muro, pero me generaba intriga de que se estaba produciendo.
Me acerco y veo una ranura entre ladrillo y ladrillo, por allí la vecina me regalaba un muy bello adorno florido que le otorgaba vida al muro.
El muro, algo tan de moda hoy, cargado de grafity’s como el facebook o aquel famoso artístico muro de The Wall, sin olvidar el que pretendió separar culturas como el de Berlín, este no es así, es muy diferente.
Este es el muro del intercambio, el muro del abrazo, el muro del compartir, el muro de la Flor, este muro deja atravesar la bondad, las buenas ondas y no es un obstáculo.
Vemos y debemos aprender, para la naturaleza no hay trabas, ella todo lo puede.