Muchas veces caminamos con la mirada gacha...
y en esas oportunidades nuestros ojos parecen ciegos...
porque no observamos lo que pisamos.
Debajo de nuestros zapatos hay un mundo sorprendente...
un Arte increible, asombroso.
Cuando nos alejamos a miles de metros de altura con un avión
vemos campos sembrados como si fuera una albombra cuadriculada.
Los ríos, se asemejan a delgados hilos.
Los árboles parecen pequeñas pecas de color verde.
Ahora te propongo algo,
que cuando camines, mires el suelo.
Si tenes un teléfono móvil
le pongas el zoom al máximo y lo retrates.
Te sorprenderá lo que descubrirás
ADIVINEN donde realicé estas capturas,
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