En la Niebla a Rawson

A las 3 de la mañana me despierto y a las 3:18, le envío un mensaje en Face a mi amigo Roberto indicándole que en un rato salía para Rawson.

Apenas llego a la ruta, observo una importante niebla. Conduzco sin mayores problemas por la ciudad hasta concluir el Acceso Oeste, ayudado por la buena iluminación tanto de la autopista como de los carteles y las casas.

Pero debo aclarar que en algún momento también se complicaba la visualización, por ejemplo en el Reconquista.

Cuando accedo a la ruta 7, apenas si se veía la trompa de mi auto. El cambio fue brusco.

En un momento, me puse a pensar si no era conveniente pararme en algún lugar, un rato, hasta que se despejara.

Luego de cruzar las vías de ferrocarril de Cortinez, observo un camión adelante mío, con buena luz y sus bandas fluorescentes bien visibles en la parte posterior.

Me coloco detrás de él a una distancia prudencial y lo sigo, a unos 80 km/h de marcha continua, ya que casi no había vehículos en la ruta.

A ese ritmo, pasamos San Andrés de Giles y llegamos hasta Carmen de Areco. Él siguió por la ruta 7 y yo me desvié por la 51. Me quedaban un poco más de 30 km para llegar a destino.

La ruta en este tramo no está muy bien pintada, pero sí lo suficiente para ver la línea de la banquina. Disminuyo un poco la velocidad y conduzco en forma prudente los restantes kilómetros.

Llego al pueblo cubierto de una espesa niebla. No le voy a poner adjetivos, porque ustedes pueden ver por sí solos las imágenes.
Paro el auto, bajo mi trípode y a documentar ese delicioso paisaje. Un placer para mis fantasías.
Muchas calles sin nombre y la poca luz, no me permitían encontrar la casa de mi amigo con facilidad. Levanto la mano y le pido que pare a un automovilista que pasaba.
Para, iba con un acompañante. Le pregunto por la calle y me responde no conocerla. Recordé a mi amigo y le mencioné su sobre nombre, “Kotata”. En forma inmediata tuve la respuesta correcta.
No hay dudas, esto sucede sólo en los pueblos de campo. Que alguien te pare en la noche para responderte una consulta y que conozcan más a las personas que en él viven que el nombre de las calles.
Subo al auto, me dirijo al lugar indicado.