Con los brazos al Cielo
Con los Brazos al cielo, como si rezara una plegaria, se eleva el Cactus, que durante algunas semanas del Verano nos regala bellas flores como tributo de la Madre Naturaleza.
Cuando niño, competía con él, comparando mi estatura.
Cuando fue creciendo, me regalaba, una vez al año alguna flor aislada y solamente de noche.
Hoy, son muchas las noches a pleno e incluso se mantienen en su máximo esplendor durante el día, que desde muy temprano, la avispas y abejas se hacen un festival de visitas, inclusive alguno que otro picaflor he visto libando en ellas.