Viernes 3 PM
Era una tarde de viernes, descansando
y hablando por teléfono con mi Amor
de pronto se nos vino la noche
y un fuerte viento para despejar nuestras mentes románticas
y una lluvia para apagar tanta pasión.
Fueron casi 100 mm en un poco más de una hora
para llenar las calles de agua
y convertirlos en verdaderos ríos,
realmente un paisaje diferente
casi comparable con Venecia.
No había boca de tormenta que absorba tanta agua
y lamentablemente terminó dejando sus huellas
en las casas de nuestro pueblo.
Trastornos para trasladarnos y diferentes incomodidades,
pero era la Madre Naturaleza que dijo
Presente
y a ella no le podemos impedir