Pagando peaje al Cacique

 Ustedes se preguntarán porque ese titulo, pero al ver las imágenes, si conocen mis publicaciones pasadas se darán cuenta enseguida.
Río Salado... para el hombre Blanco ...
Tuvicha Mirim, para nuestros habitantes originarios, de nuestras inmensas Pampas.
Hace unos días decido emprender viaje al Sur de nuestra provincia, a Claromeco. Para compartir unos días con mi amigo Hector.

Este paseo lo quería hacer por la gran Ruta 3. En oportunidades anteriores la había recorrido, pero nunca retratado pueblos intermedios. Decido tomar la Ruta en San Miguel del Monte.
Saben muy bien, soy de madrugar. A las 7 de la mañana hice mis primeras fotos, mi parada obliga, el Río Salado, a unos pocos kilómetros al Sur de Monte.
Estas fotos eran mi primer escala, un poco la estirar las piernas, y caminar sobre el pasto aun húmedo, por una leve niebla o rocío.

 Pero también me servía para hacer entrar en calor a la cámara.
Estaba en mi mente desde mi partida, lo que uno nunca sabe, cual es la escena que nos regalará la naturaleza. Podrían ser imágenes sencillas o con un regalo extra. 
Y el Gran Cacique siempre me mima y algo me regala.
Cuando estoy llegando, miro hacia mi derecha y veo un colchón de niebla sobre unos árboles a lo lejos. Seguro sobre alguna de las vueltas del río o en algún bañado o lagunita.

Una decena de fotos, que cinco comparto con ustedes. Respirar un poco de aire puro y a seguir viaje. Me quedaban unos 500 km por delante y cuatro pueblos programados para visitar. Como escala, como descanso. Para comer algo, distraerme y documentar con mis fotos.
Ahora, solo los invito a seguir mi viaje, que iré compartiendo, quizá no en el mismo orden que lo retraté, pero en unos cuantos meses develarán toda la historia.